jueves, 18 de julio de 2024

El hijo de su madre


Los parentescos gobiernan. El hilo que une. La raíz que nutre y cuanta armoniosa frase haga juego con el linaje heredado, adquirido y naturalizado que andan dando vueltas por allí, sea capaz de ilustrar. Algunas encajan a la perfección; otras hay que hacer un poco de fuerza, como quien encastra una figura en otra de dimensiones geométricas diferentes

Tal es el caso del Pancho. Heredado hasta el apodo, su nombre real era Pedro, y quizá por ser fiel representante de su género, en su vida se interesó ni le interesó saber la cuna de su origen. Alcanzó que su madre le hiciera saber que de ella provino y así se lanzó a vivir. 

Pero llegó un día, en el cual, justificado por la edad que su documento indicaba, se dio cuenta de muchas cosas. Primero que había cumplido 40; segundo que empezó a sacar cuentas y algunas no le cerraban. Por caso la de quienes identificó toda su vida como sus primos hermanos, en realidad eran un grupo de pibes de apellido Primo, que eran los hijos del dueño de la fábrica de colchones, “PRIMO HERMANOS” que su madre cambiaba con frecuencia; también advirtió con sagacidad, al hombre que toda su vida vio cómo se asomaba en el porche de la casa frente a la suya, y rápidamente se cruzaba para ingresar a su casa por la puerta del patio

Aquella imagen, repetida a diario, le hizo sospechar que algo raro había entre la actitud llamativa y la casualidad que la puerta del patio estaba siempre sin llave… y si de casualidades se habla, lo que le resultó verdaderamente increíble es que el repartidor de soda, también ingresaba a dejar los sifones por la puerta del patio, al igual que el diariero y el que aplicaba inyecciones también

Aunque todavía faltaba algo para cerrar el círculo y la pieza que faltaba la encontró aquel sábado por la tarde, recorriendo las callecitas del pueblo, cuando encontró a su madre junto a Pancho, el cerrajero, sentados en las afueras de una cantina y allí comprendió todo. La puerta del patio no tenía cerradura

12 comentarios:

  1. Gracias!! Cuántas historias de estás me contó mí abuela

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  2. Estas a full Patricio, muy lindas historias ..abrazo y a seguir publicando que están muy buenas

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  3. Una historia que me hizo recordar a otra de las tantas que me contó mi madre y yo no lo podía creer.
    Lo sabes contar muy bien.

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  4. Muy buena anécdota, historia, relato que retrata tan bien esas historias repetidas en los pueblos donde todo se sabe y todo lo callan. Un genio Patri!!!

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    1. Pueblo chico... idem a ciudad grande !! Gracias prima querida

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