A como yo veo las cosas, las neuronas tienen más utilidades que el uso que se les da y el corazón, además de bombear sangre, brinda beneficios que no salen en estudios cibernéticos
Algunos tienen mucha suerte. Les alcanza con respirar, porque tienen el cerebro como terraza para tomar fresco y al corazón de adorno como ropero antiguo
A otros nos cuesta un poco más. Por eso es por lo que quisiera alguna vez que alguien me explique cómo es.
Porque creo que sentir es otra cosa; pero el mundo se estupidizó de tal manera, que cualquiera manda fruta y es creíble.
Basta con preguntar porque hacen lo que hacen, para que tilden su respuesta y parece que es bueno porque al menos por un momento se quedan pensando.
Me equivoqué otra vez; si. Una más y van…
Fueron tantas que he perdido noción de la cantidad; pero soy consciente que han sido muchas.
Aunque los hechos acrediten testimonios en mi contra, voy a seguir adelante; no pienso detenerme, porque no puedo vivir sin una ilusión que me lleve y me anime a buscar el amor más allá de mi profundo sentir
Mi catecismo es simple. Creo en lo que siento y a pesar del dolor que esto me causa por transitar de contramano a la vulgar realidad, no tengo nada que reprocharme.
Nunca me escondo y hay una costumbre de sospechar del que dice la verdad, que ya me tiene harto, porque siempre hago las cosas desde el corazón
Muestro hasta lo que el dogma social no recomienda; es decir, el alma, exactamente tal como es
Es que nunca me importó aparentar lo que no soy.
No me llevo de revanchas ni de habladurías.
No tengo deudas pendientes
No juzgo ni condeno
Ejerzo el perdón
Aunque no funcione para mi… Lo tengo bien entendido; pero parece que no alcanza con aceptarlo, porque además tengo que salir lastimado
Nunca recibo lo que doy. Pero basta que me equivoque, para cobrarme intereses
Ni elijo ni decido. Solo siento
Mi silencio no es falta de habla: Es vacío de tristeza
Tengo claro que querer no es amar; pero a veces transijo, porque también necesito una caricia
Vaya a saber no ¿? Mutación le dicen
Tal vez estupidicé mi forma; al fin de cuentas, a mí también me alcance con solo respirar…
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