Adios querida Compañera (nunca te voy a olvidar)

Nunca pensé que el final sería de esta manera

Ni siquiera me pude despedir

Después de tantas historias…juntos

Te vas así…y resulta inevitable el recuerdo...y las lágrimas caen una tras otra, como buscando una explicación

Porque ¿? Porque así ¿? Porque a vos ¿?

Nada ni nadie puede explicar lo que siento en este momento

El dolor golpea y el silencio abruma hasta dispersar mis pensamientos

Lo inesperado abruptamente alojó vacío donde antes estaba repleto de tu voz

Invaden momentos en mi mente y afloran preguntas que no encuentran respuestas; solo el desconsuelo indescriptible que el silencio acostumbra a otorgar

Una y otra vez resuena en mi interior la calidez de tu habla y resulta inevitable no querer entrar a la habitación para encontrarte allí sin vida

Me arrodillo a los pies de esa cama donde yaces, para clamar súplica por algo que ya no volverá a ser

Te miro…ahí…apagada y en un intento desesperado por revivirte mis manos te abrazan sin saber que ya no hay nada que hacer

En este escrito, te honro y agradezco por todos tus relatos e historias, en especial por aquellas noches que me quedaba a escucharte

Celebro y agradezco a la vida que nos haya cruzado; por aquella tarde en que nos vimos, ambos supimos que seríamos inseparables y hoy… verte así… me apena tanto

Hombre de causas y creencias, acepto que estas cosas pasan; por eso prefiero saber que el destino te llevó porque se cumplió tu ciclo, a tenerte entre mis manos dándote palmadas para que sigas adelante

Este es el último adiós, me despido con un nudo en la garganta querida compañera de tantas noches encendida.

Donde sea que depositen tus restos nunca te voy a olvidar querida radio portátil