Se cita a la Primera Junta a prestar declaración:
Pasado, Presente y Futuro estan Acusados de ocupar un lugar que no les fue otorgado
La humanidad denunciante les reclama y los somete a JuicioPor cometer el crimen imperdonable de apropiación ilegal de la verdad
Su señoría, el Gran Dios imparte justicia
Desde su estrado invita a los acusados a realizar su descargo.
Juran decir la Verdad y toman asiento.
Con su altiva soberbia el presente gana la palabra y dice…
“Su Señoría.. Son infundados los argumentos
por los que se me acusa. Soy víctima del Pasado, que deja a las personas en mal
estado y encuentran en mí, su lugar en la vida.. No solo eso su Señoría, estoy
permanentemente acosado por el Futuro”
El futuro desde su banquillo, se defiende:
“Con el
mismo argumento que expone este sujeto, Su Señoría, yo podría decir lo mismo.” “Las
personas, no quieren hablar de Futuro, porque el Señor Presente, les engaña y
les dice que allí se vive a perpetuidad y eso, todos lo sabemos, no es cierto.
Sino el presente, debe decir, donde comienza y donde termina su dominio…. ¡¡¡ Que
se juegue y confiese su Señoría, cuáles son sus límites...!!!” “Además soy el
último eslabón…el más cercano a usted su Señoría….”
Dios llama a lugar al Futuro: “Su humildad deja mucho que
desear Señor Futuro”
Mientras el Pasado se llama a silencio, el Presente eleva el
tono y responde:
“AAAAHHH CLAROOO,
ahora el Señor Futuro decide sobre la vida de las personas ¡!!... Su Señoría,
el Futuro ignora, que fue usted, quien me otorgó este lugar. Dígale usted
cuales son mis límites”
Dios le llama la atención: “No tolero su irreverencia ¡!!” “Le ruego guarde compostura. Esta usted
acusado de excederse en sus límites, no de ocuparlos….”
Silencio en la sala. La palabra sonó como trueno, y el cielo
se oscureció.
El pasado pide la palabra, que le es concedida:
“Su Señoría
mi posición no guarda relación con la de estos dos señores… usted sabe bien que
significa EL PASADO…, su FE se basa en una historia acontecida en un Pasado…”
Dios, por primera vez se pone jocoso…. “Dígame Señor Pasado, puede usted recordar el momento que yo cree al
Mundo…??” Mire…hágame el favor…prosiga…
El pasado retoma la palabra…. “Su Señoría, Señores del Jurado, Me declaro Culpable… Culpable de
generar Conciencia…de aferrar a la persona a su raíz…de….”
BASTAAA ¡!!
FARABUTE ¡!!! MENTIROSO ¡!! El que grita interrumpiendo, inesperada y
Sorpresivamente es el Futuro; el Presente hace oír su voz… “ESTAFADORES ¡!!! USURPADORES!!!”, el Pasado brama… “NO EXISTEN ¡!!! SIN MI USTEDES NO EXISTEN!!”
Dios decide finalizar el juicio. Los alegatos son pruebas más
que suficientes. El jurado delibera y la humanidad espera con ansias las penas.
El Fiscal pide a la audiencia se ponga de pie, para
escucharla sentencia.
“PASADO,
PRESENTE y FUTURO….se los conmina a pasar el resto de la eternidad JUNTOS.
Ustedes son lo mismo, para el Creador…”
Los murmullos en la sala, son notorios. No hay conformidad,
con la sentencia.
SILENCIO EN
LA SALA ¡!!! SILENCIOOO EN LA SALA ¡!!!
El martilleo de Dios, impone respeto, y todos hacen silencio.
Con firmeza el Juez de la vida hace saber….
Fue el poeta quien plasmó…. “Nunca Serás…Parte de mi pasado, si no formas parte del presente y no te
pienso en el futuro….”
“Así como
la coexistencia garantiza la independencia de la Unión, No hay peor enfermedad
que la estupidez de creer en el absolutismo fundamentado en una idea carente de
propiedad… Cuando Sin Pasado no hay Ilusiones… Sin Presente no hay Sueños… y Sin
Futuro no hay Historia…”
En las escalinatas de las afueras del Palacio de tribunales,
todavía se comentaba la Sabiduría de la sentencia. A la salida se vio retirarse
en la misma dirección a los tres acusados. Algunos juran que lo hicieron en silencio.
Otros aseguran haber visto al Presente prendiendo un faso, mirando al pasado de
reojo, y sobrando al futuro tirando la
bocanada de humo sobre este.
Paso una mina, el Presente le dijo algo por lo bajo y
desapareció con ella…dejando clara evidencia de lo que dura un momento…
mientras el Pasado y el Futuro entraron a un Bar para limar asperezas. Parece
que tenían mucho de qué hablar.
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