Me veo despertar cada mañana
En una casa templada
Por la calidez de un hogar
Ingresar al sol entre abiertos postigos
Iluminando la mesa de rústico madero
Calentar la pava a fuego lento
Tomar mate con pan de chicharrón
Dedicarme a domésticos quehaceres
Para llenar la despensa
Llegarme hasta el almacén
De ramos generales
Salir a descubrir por las tardes
Sinuosas callecitas
Que orienten nuevos destinos
Disfrutar del paisaje repleto de canteros
Adornados con jazmines, lirios y clavelinas
Hacer un alto de repente
Sentarme a perder la mirada
Contemplar el horizonte
Respirar profundo la pureza del día
Sentir la frescura del viento
Impactar de lleno en mi rostro
Ordenar ideas… Liberar pensamientos
Antes de emprender el regreso
Sedientas necesidades satisfacer
Abastecidas cristalinas por una vertiente
Descansar en la mecedora
Cercana al crepitar de los leños
Leyendo un libro… Esperando la noche
Alimentando sueños
Que bonito escribes, Patricio, y con qué facilidad expones tus sentimientos... Es como si dejaras que el corazón hablase y él mismo te diera la pluma que dirige los dedos de tus manos.
ResponderBorrarTe imagino, si, algún día en esa casa templada que percibo en la imagen de tu perfil.
Me ha encantado de nuevo leerte, querido amigo. "Tu manera de ser" hace que se te quiera.
P.D. Escuché el vídeo, me gustó mucho y reí. Gracias también por ese regalo.
¡Fuerte y gran abrazo!!
Muchas Gracias Mila !!! Placer recbir tu comentario. Te dejo mi saludo. Paz y Bien
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