sábado, 4 de abril de 2015

ADN Barrial

Azahares brotan del jardín al frente de mi casa pintada con cal, la de mampara verde y un hall 
De canteros con flores que adorna mi Mamá con una Yuca en un tronco y detrás del tapial y un honguito averiado ilumina el rosal
Al lado vivía Don Coria y al otro Piantanida 
Al fondo vivía una vieja, Cara de orto tenía 
Por la puerta que da al patio una pared es blanca y la otra color mostaza
Hay macetas y una pileta donde se guardan baldes y alguna botella, que era motivo del grito que todas las tardes mi vieja desde su pieza pegaba , por el estruendo de un vidrio roto por un pelotazo que acertaba en el arco que una puerta oficiaba
Probarme en Chaca quería. Jugar como Trobbiani soñaba
En el medio tres rejillas servían de escurrimiento. La del medio la rompimos y nos sirvió de escarmiento. Aprovechando la visita de Sosita el que era Técnico, jugando juegos de hermanos, lance por el aire a Daniela que volando con sus manos
Fue a parar al hospital de la Ruta y esa noche no fuimos a Don Segundo y nos quedamos sin postre
Llegando al final del Patio había una parrilla, un desnivel en pendiente y un cuartito
Dos camas y una silla pintada de negro una verja se abría para llegar al fondo un par escalones tenías
Al bajar un árbol de duraznos y un limonero había
Ropa tendida y un sonido que venía del bombeador donde salía agua fría
Acostumbraba a jugar cerca de la pared de rejas con rombos
Un tapial con escombros y un tero que daba vueltas cerca de un cantero
En un rinconcito ruda y en otro yerba y café que sirven de abono
En la cocina almorzábamos y en el comedor cenábamos
Será porque había tele, o vaya a saber porque
Mi viejo madrugaba y todo el día trabajaba
A cargo entonces me dejaba y como Hombre debía cortar el pasto, hacer mandados y la casa cuidar
Ser Bueno con los Vecinos y no dar que hablar
Los sábados ir a Scout y los domingos a Misa que el Padre Enrique oficiaba  
Por ser su ahijado corría con ventaja y las macanas que en la semana me mandaba, sin confesar me perdonaba
Por eso, en cada celebración como acólito lo ayudaba
Ubicado a su derecha, con un guiño me hacía saber cuando tocar las campanas y cuando tenía más sed…

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