Lo lloraban todos. De todos lados llegaban para comprobar que era cierto, no pudiendo creer la noticia. Agolpados en la puerta de la casa de sepelios coincidían que todo cuanto hizo en vida lo hizo sin interés. Por eso era visitado a diario por mucha gente que le traían cosas que el atesoraba. De allí que todos lo cuidaban. No lo dejaban solo nunca. Lo acompañaban día y noche.
A todos le cayó mal la noticia de su partida, causando
gran impacto en la comunidad.
Allegados, vecinos y transeúntes ocasionales se
acercaban a despedir sus restos y a dejar algunas palabras
Uno de los que se acercó fue el mudo Farias, que, con
lenguaje de señas enarboló un discurso que nadie olvidaría. La emoción que
transmitía en su manifiesto llenó los ojos de lágrimas de todos los presentes. Caló
hondo cuando gestualmente con sus manos expresó “ME DEJA UN GRAN VACIO”
Doña Felipa, que conocía al finado desde pequeño,
embargada por la emoción por tan profundas palabras, se acercó para agradecer
al mudo, quien con el último aliento que le quedaba, guturalmente le respondió “era
un gran hijo…” y no pudo terminar, porque irrumpió en angustioso llanto, tanto
que tuvieron que asistirlo porque le bajó la presión, pero se recuperó rápidamente.
De lo que no se pudo recuperar, fue de la partida del
finado… Un gran hijo que todo lo hacía sin interés… porque jamás le pagó la
deuda millonaria en dólares que alguna vez le había prestado

🤣🤣🤣🤣, muy Woooo!!!
ResponderBorrarGracias querido amigo
BorrarHay cosas que la gente ignora, pero el préstamo en dólares que hay hoy, todos lo sabemos, esperamos que el que los solicitó, pueda devolverlos en esa moneda y no se empeñen las tierras u otros bienes del país.
ResponderBorrarPerdón por mezclar las ideas, pero eso me vino a la mente y fue espontáneo.
Buen día miércoles querido Patricio.
Abrazo.
Muchas gracias Elsa
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