Una mirada a otros tiempos me lleva a ver al chico que alguna vez fui
Haciendo juego con una pelota que Madre me regaló en nombre de los reyes magos
De goma número cuatro, hasta gajos tenía
Picaba como un demonio y su volar sonaba como un jet
Algunos vidrios rotos y varios rosales deshojados le hicieron mala fama
La cuidaba más que a mi propia vida. Donde iba ella venía bajo mi brazo
Al pie la llevaba y nadie me la podía quitar
Historias de pisadas y de épicos goles trascendían las fronteras del barrio
Maldito el día que el asesino oculto en la verja de la Iglesia de la Calle San Pedro, clavó su filo en medio de mi pelota y allí quedo... Partida, inerme y sin aire
Me la llevé bajo el brazo sabiendo que nada podía hacer
En lo más profundo de mi alma llevo su aroma y su color
A veces creo verla junto a mi cama
Con ella se fue mi infancia pero el niño sigue haciendo travesuras en el barrio donde sembró su inocencia
Rompiendo vidrios y deshojando rosales jugando con una pelota
Uff..que recuerdos!! Como picaban esos pelotazos! Y como picaban!! Había que dominarla!! Eh? Y ni hablar de la puntería para clavarla en una verja!! Muy bueno Pat! Abrazo
ResponderBorrarGracias Carlitos !!! Sabía que vos me la ibas a devolver al pie. Un Abrazo
ResponderBorrarJajjaa porque la fabricaban para que pique tanto? Solos los virtuosos podían dominarla...sumado si jugábamos con arcos nadie quería ir a buscarla cuando se iba atrás de los arcos! No paraba nunca y había que volver a traerla a la cancha jaja
ResponderBorrarMuy bueno pato
Mucha Gracias !!! Un Abrazo
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