viernes, 23 de junio de 2023

A las sombras de una calle oscura (historia de nunca acabar)

¡¡Pone las manos contra la pared y no emitas sonido!!

Fue lo único que dijo y último que hizo, ya que en ese instante un grupo de efectivos, para repeler choques de alto riesgo, se hizo presente, alertado por la denuncia de la vecina, que habitaba sobre la calle donde en su puerta se estaba cometiendo el delito

La intervención de los hombres munidos de armamento de alto impacto, escudos y elementos de protección facial y craneano, sostuvieron al malhechor, que no dejaba de gritar su inocencia, mientras era reducido con técnicas de última generación denominada “PALIZA” (Procedimiento Aplicado para Llevar Insurrectos a Zonas Amigables), que consiste en aplicar el uso de palabras disuasivas y persuasivas al detenido, acerca del trato que recibirá una vez que ocupe la celda destinada para reflexionar acerca de lo acontecido

En tanto, preservando la identidad de la joven víctima, para aislarla del sitio, hubo que contener sus emociones, ya que inexplicablemente hizo varios intentos por regresar a la escena del crimen

El personal del gabinete psicológico, de asistencia a víctimas que pasaron por estos trances, aseguran que la paciente se encuentra bajo los efectos del síndrome de Estocolmo, y por tal razón asume dicha conducta, por pérdida de realidad y un borde de auto percepción de cómplice del delincuente

El oficial inspector a cargo del operativo, en conferencia de prensa hizo un breve relato de los hechos, con la promesa periodística de no hacer preguntas al respecto

“Siendo la hora 23.56 del día que nos encontramos, la guardia del comando de emergencias nocturnas, recibe el llamado de una vecina que prefiere mantener su nombre en reserva, denunciando un acto de perversa malicia, perpetrado por un masculino, caucásico, edad promedio y de buen porte, que se encontraba en las sombras de la calle donde habita la denunciante, más precisamente en su puerta, que sin foco que provea iluminación, permitió al detenido, llevar a su victima y mientras profería palabras acorde a su nivel de depravación, iba desnudando a su víctima con intenciones de someterla, y en el instante que le ordena a la NN femenina ¡¡Pone las manos contra la pared y no emitas sonido!! varios móviles del destacamento, doblando por la esquina, aparecen de sorpresa dando soporte al grupo elite de nuestra fuerza, quienes impiden que el degenerado lleve adelante su cometido”

Mientras en la celda para presos declarados de riesgo, el detenido era interrogado aplicando el uso de la técnica de última generación, para averiguar los motivos de su sádico accionar

Con lo único que le quedaba de aliento por la persuasión recibida, el masculino alegó: “ella es mi novia y no aguantábamos más…”

 

Imagen: https://sp.depositphotos.com/stock-photos/intervenci%C3%B3n-policial.html

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