Un suspiro al Viento...

No lo sabía. Supongo que vos tampoco

Que aquella sería la última vez que hablaríamos

Acaso lo tenía que saber ¿? Me retumba esa pregunta en la cabeza

Me compartiste una foto de Magnolia y yo de Olivia

Me habías preguntado por el nuevo trabajo y escuchaste atenta mi relato; allí me confiaste que irías a ver a Moira hasta Bahía, porque la extrañabas

La historia al fin hacía justicia; nos debía un encuentro, para trabar conversa y definitivamente “conocernos” como corresponde

Alguna vez (Creo que varias veces) te dije, que no me privaras de quererte; porque no tuve la oportunidad de hacerlo cuando pequeño o adolescente

Solo te había visto personalmente, en un par de ocasiones, en casa de Tía Clarita. No recordaba, que habías estado en el casamiento de Mary, y yo recién lo advertí cuando en el grupo de wsp, comenzaron a compartir fotos de entonces

Y lo que es el destino; justo cuando la historia estaba haciendo los deberes… es el quien me priva de vos

Tus relatos, cautivantes de tus viajes a Ushuaia con Tía Hetty, me permitían llegarme con la imaginación a sitios, donde yo no llegué

Le ponías tanta pasión, que me resultaba imposible dejar de escucharte. Nos era imposible cortar, cada vez que hablábamos. Porque siempre surgía algún que otro tema, que nos volvía a enganchar

Que los parió ¡!! Justo que empezaba a armar el rompecabezas de partes que me quedaron sin completar, viene a pasar esto…

Lloré mucho, sabes. De amargura, de impotencia

Cuantas cosas nos quedaron para sabernos

En esas despedidas, siempre quedaba el “Te quiero Mucho” y tu pedido que cuando vaya a Mardel, pase a visitarte

Digo y evito el “por suerte” porque no era azaroso el decir. Más bien desde lo profundo del corazón

Como cuando me contabas, que tenías muchas cosas para escribir, de Carlos y de Vos, y que no te animabas, por eso me pedías a mí, que NUNCA DEJARA DE ESCRIBIR y de compartirte, porque sentías que era un pedacito tuyo cada letra

Cuanto me alegra, que, a través de esos versos, le hayas expresado a Carlos cuanto lo amabas

Tal vez por eso; aun con bronca y dolor, es que como puedo, te escribo. Porque quiero ser fiel a mi palabra y en versos o como sea, contarte que sigues aquí, entre nosotros; que te vamos a extrañar, pero también te vamos a tener siempre presente

Eres parte nuestra y siempre lo serás

Prometo que, en cada renglón, en cada verso, te haré parte, y ahora que estas junto a Carlos, podrás sonreír desde el cielo, porque estoy haciendo lo que me pedias

Ni siquiera se el orden de estos renglones; acaso importa ¿? Si en definitiva lo que va a quedar es que te quise mucho y te lo manifesté; me hubiera encantado darte un fuerte abrazo… y hacerte sentir paz

La misma paz que anhelo y deseo ahora tengas

Descansa en Paz

Te quiero Mucho Ichi