miércoles, 1 de septiembre de 2021

Dos lucas de tiempo (poema esotérico)

Desisto

He llegado hasta aquí

Más no puedo seguir

El presente del pasado

Acosa mi futuro

Cada vez que mis ojos

Distraen su mirar

Donde sea que me encuentre

11:11 marca un reloj

Es un mensaje del destino 

O es que acaso es como dicen

Es el llamado de los ángeles

Que acuden a las almas

Sensibles de sentir

Con estos antecedentes

Recomendada por mi madrina

Me presenté delante de Doña Nidia

Señora entrada en edad

Rostro amigable y adorables modales

Un quiosco como coartada

Disfrazaba su negocio

Detrás de las golosinas y cigarrillos

En realidad, escondía

Su verdadera dedicación

Era bruja declarada

Como las que escriben en cuentos

Lúgubre y sombrío

Aroma esotérico

Me pregunté una y mil

Veces que estaba haciendo

En ese lugar

Me acordé de mi madrina

Como tribuna popular con el delantero

Que erró un penal

Lo cierto es que sin preguntar

Comenzó con su tijera

A “cortar” mi maleficio

Por arriba de mi cabeza

Inevitable y mal habido mi pensar

Derivó en la osamenta que el toro

Orgulloso luce entre las vacas

Una mueca con intención de carcajada

Disimulé sabiamente

La bruja ni se dio cuenta

Pasada más de una hora

El único resultado

Fue un bostezo de mi parte

Que empañó todos los vidrios

Para entonces mi interés

Era tan creíble

Como las tasas

Que ofrecen los bancos

De repente…

Las palabras mágicas:

Amigo ya está curado¡!!

(mientras decía para mi)

Cuanto me va a costar esto ¿?

Dispuesto a reconocer su labor

Pregunté por sus honorarios

Pero algo… turbó ese instante

El reloj colgado en la pared

Marcaba con sus agujas 11:11

Frente a la atónita mirada

De mis ojos

Hasta aquí llegó mi amor¡!!

Atiné a expresar

Mientras depositaba en sus manos

Dos lucas contantes y sonantes

Por algo que me seguía pasando

En fin… dije suspirando

Saludé y me fui blasfemando bajito

Silbando “El Rock del Pedazo”

Sin creer porque y sin saber la causa

Me senté en un café para olvidarme de todo

Y nuevamente… otra vez

11:11 frente a mis ojos¡!!

Pero esta vez por el partido

Entre Argentina y Brasil

Por la final de la Copa América

Menos mal le dije al mozo

Mientras le abonaba el café

Por un momento pensé

Que me había vuelto loco

Me voy a casa… ya es tarde

En el reloj de pared

Las agujas marcan 11:11

En el bolsillo me faltan dos lucas y una hora

De tiempo en mi vida

2 comentarios:

  1. Leí y lo volví a leer, pues en cada renglón hay algo que indica un guiño al presagio oculto en el misterio de lo que es la vida. Quién alguna vez no ha ido a una de esas brujas que levante la mano, y lo digo con una sonrisa en los labios. Me gustó el relato en forma de leyenda. Buenas noches Patricio.

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