Suffragium y el Poder (Cuento)

Una prueba le pidió el Rey

Si en verdad pretendía obtener un beneficio del Palacio

Lo que ordene usted Su Majestad

Respondió el Joven

Allá en los Bosques habita una bestia espeluznante

Que se esconde por el día y sale por las noches

Aterrando a nuestros Pobladores, que pierden sus

Cultivos y encierran su ganado

Ve hasta allí y tráeme su Cabeza

Así y solo así, te otorgaré las semillas que necesitas y la porción de tierra que pretendes para vivir

Dime Noble Caballero, como piensas atrapar a la Bestia

“Con la Fe como escudo y solo una flecha en mi carcaj¡!!”

Los murmullos y comentarios entre los cortesanos y súbitos a la corona causaron sorpresa y estupor al Rey

¡!! INSOLENTE¡!! ASI PRETENDES CUMPLIR LO QUE ORDENE¡!!

El joven dando muestras de respeto, postrase ante todos y pide un voto de confianza: “Si no regreso, habré sido devorado por la Bestia y si regreso sin su cabeza, recibiré el castigo que se me imponga”

Habiendo recibido la aprobación, se postró ante el Rey y decidido emprendió la marcha hacia los tupidos bosques para enfrentar a la temible Bestia

Desde entonces, nada se supo de el

Pasaron días, pasaron semanas…

Pasaron muchos años, hasta su regreso

Durante ese tiempo, nadie habló jamás de la temible Bestia

Los cultivos dieron frutos y los ganados crías

Entonces fue tiempo que aquel Joven apuesto, regresara

Ingresó al Palacio y viendo que no traía en sus manos una cabeza, fue aprehendido por la Guardia Real

Ante el trono volvió a postrarse y una voz enérgica lo acusa:

“El Rey fue encontrado muerto hace varios inviernos y yo envejecí esperando cumplas tu promesa”

Al levantar su mirada, vio a la Princesa, que heredó el trono de su Padre y era quien le espetaba el reclamo

“Es que no había tal Bestia. Jamás existió”

¡!QUE DICES!!!?? EXPLICATE¡!!

“Al llegar al Bosque, pasé noches enteras oculto en un refugio; tendiendo trampas; buscando sin cesar su morada. Hasta que un día, de entre las malezas, asomó una figura, sombría y tétrica, hambrienta y Feroz, que acecho mi defensa a pesar del fuego. Tomé coraje, erguí mi valentía y atravesé su pecho con la flecha, hasta caer muerto a mis pies”

¡!ENTONCES… ¿?!!!

“Ante mis ojos, yacía el Rey”

¡!!EL REY ¿?!!

“Si, el mismo Rey, que siguió mis pasos, portando su Espada, para matarme”

¡!!CÓMO EL REY HARÍA ALGO ASI ¿?!!!

“Pues porque el Rey…Era la Bestia. Él era quien acechaba los cultivos y arreciaba sobre el ganado; él era quien atemorizaba a los pobladores que acudían a su Palacio, para pedir protección y de ese modo tener a todos bajo su Poder”

¡!!MIENTES!!!! ¡!! SERAS CASTIGADO CON 100 LATIGAZOS y CONDENADO A MORIR DECAPITADO

“Su Majestad, yo no he faltado a mi promesa. Di muerte a la Bestia y en su cabeza lleva usted su Corona”

El día nueve del mes ocho, en memoria del Rey muerto, el Joven llamado Suffragium, fue azotado y luego llevado a la mazmorra donde recibió el filo de la guillotina

 

Corolario:

No creas en todo, ni extiendas o pidas un voto de confianza a quien pretende, a partir de las mentiras y la opresión, perpetuarse en el poder. No importa el tiempo. No importa la comarca, ni el color de sus banderas. Todos terminan siendo lo mismo