Somos dos en uno
Mis brazos sostienen tu cuerpo
Figura sin geometría
Cambia de estado y de forma
Alterando las leyes físicas
De mis manos nacen caricias
Que recorren tu piel
De paso por tu cintura
Contemplo en silencio
Tus blancas mesetas
Desciendo a lo profundo
Del majestuoso abismo
Atravesando muy lento
Para llegar a tus piernas
Meneas insinuante tu centro
Elevas urgente mi lava
Que emerge con tus besos
Arden mis labios
Calmo mi sed en tus pechos
A la sombra de tu cabello me recuesto
Mirando al cielo de tus ojos
Se agita mi respiración
El deseo se adentra en tus adentros
Tiempo de volver a recorrer tu cuerpo